Dos vidas

A donde llevo esta memoria, que ya no la contengo…

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El vuelo no llegó a Nueva York,
(el aletear de la mariposa cambió los planes)
el Tecolote Hércules, partió a San Francisco
( 60 y mas toneladas)
con su carga de ilusiones cruzó el Golden Gate.
Los copos de nieve no llegaron a mi pelo,
(ráfagas del viento Norte)
pero me trajo la oración del valor y Amor sincero:
(este cuerpo se vuelve acero)
y el hombre volvió a derramar lágrimas de su corazón

en mi fallida memoria.
Depositó secretos en mis manos
(los papeles se deshacen)
y lo besé por horas,
(la madeja se desteje)
solo besos, pues
ya no tengo medicina para sus heridas
(y pues no soy médico)
ni caminos que recorrer,
(no soy corredor)
ni águilas o tormentas para seguir
(no soy ave)
ni me quedan hijos desamparados por cuidar.
(aun no tengo guardería)
Estoy sola por fin,
(mujer entera)
mirando la acera de enfrente
(la dueña del portal)
cómo pasan
(se acabaron las banquetas)
y se alejan las historias de los demás
(solo son historias, nada que ver)
y como inicia la mía.
(por fin plenamente)
(sobre hierba descansaremos).