Tu flecha viene 

tropel de caballos en éxtasis

vestigio de luz.

Insertado en el alambre,
has llegado deletreando una canción
y cantas en tu vibrante melodía a los cuatro vientos del universo,
la candente canción de las quimeras.

Vecindades que emanan tempestades,
vuelvo a tu luz,
nunca es bueno un devenir contigo
nunca ha sido bueno tener estas atenciones con tono fúnebre,
con este destino anclado a ti o a la nada...
solo tres años, dos o ninguno.
Esta impaciencia me sabe a desdicha.

Como es que caí

Coloco la rueda de colores
en mi carretera de emociones

prefiero ignorar su lujurioso temporal,
posarme como pájaro en un nido a cantar,
pensando que nube traspasar.

Ir de un lado a otro de la nada
de la nada que eres tu
del vacío que me dejaste

pues mientras posas tus alas en mi tempestad
ya no me matas
ni hieres

solo te miro pasar
pues tu aroma ya es muy parecido
a las rosas sobrellorada lápida.

Y me dejaste al filo de la nada
como un equilibrista sin destino
una mariposa sin rumbo.

Retiraste la mieles de tu cuerpo
el orgullo de mi vida
mi nectar favorito.

Y sigo vagando
buscando tu olvido
en otras rosas
con otros sentidos.

Ignorante vuelves
a la flor de olvido
entre las penunmbras
riegas mi destino
involucras tu nombre

sin tus apellidos.

Cuando escribes me gustas
trazas un hilo invisible por mi cuerpo,
haces este amor, a la distancia
y rozas levemente las puntas de los dedos.

entusiasmada tejo nuestra red,
y llegas por la mirada entre tus frases
a mi vientre
me acaricias
estrujas
devoras
entras con tu lengua
y tu ardiente postura hacia las piernas
me balanceo

entras en mi.
nuestro mares a la deriba
feliz naúfraga de tus deseos.

Solo marcho por el mundo que  luz  ha dado,
como una mariposa curiosa
entro al mundo de cautivos
me embelezo con los unicornios azules,
le escribo versos al  orgulloso fauno
y trepo en la colina de los siervos.

Voy derrochando como mujer rica por la vida
nada me preocupa
nada me espanta,
me acabé el llanto de los muertos,
me bebí la vida en un jarrito,
y me quedé sonámbula
esperando el regreso de alguien que no me acuerdo.

Espero a los trenes y a los barcos
tejo las trenzas que nunca llegaran al cielo,
espanto la tristeza de mis sueños
hago pasteles para los santos.

Soy la muñeca rota
la canción mal parida,
la mariposa que vuela
como flor de un día,

Soy prisionera,
complice, maldecida,

pero felizmente, bailo por la vida.

Abro las entrañas al manantial de tu aliento,
desnuda voy a tu mundo
sin prisas ni caretas,
basta de tanta falsedad
si nos conocemos desde el cielo hasta el infierno.
Desde la punta de tu cabello por donde transitan
jinetes furiosos
hasta la punta de los pies tejiendo quimeras.

Basta de caretas
de nuestra soledad aprisionada
de los odios que repartimos
y batallas a muerte acabadas en la cama.

Basta,
logremos ya cada quien su mundo
sus ambiciones y exesos sin medida.
Y pongamos freno a la pasión que se desata,
al roce de tu cuerpo
a manos enlazadas
al vuelo de las palabras
a esta inercia contenida
cuando te miro a los ojos
y evitas decir lo que amas.

Tenemos la tierra prometida,
tiremos esta pared de odios
de frases acribilladas.

Solo giro mi cuerpo
y si te incito,
te invito al arcoiris de la nada.

El hombre de los infortunios.

Al ser que me habita.

Solo fui  luz en tu penumbra

rastro que te siguió al fondo de la entraña

manantial habitante en lo profundo

avispa

lucero

reflejo de la nada.

ser de bosque resucitado

semi dios – hombre parido en el grito, en las nostalgias.

ya no veo tu verdad con tanta sombra,

necesito de la luz de mis mañanas.

canto en la oscuridad profunda

tomo del manantial del arcoíris

no te puedo seguir

solo soy simple mujer mortal

la que heriste.

Busco en mi paz ser reina

la siempre amada mujer en despertares del Guadiana,

encontré la luz que me hipnotiza

baila en mi vientre, y sigo huidiza.

aunque te amo, ame y amare en varios tiempos

tu amnesia me es desgarradora,

mas tu cuerpo me grita, llama, corre a los encuentros

en que fuimos felices mariposas.

Tu boca me rechaza ofensiva

mirada veneno que me incita,

mas tus manos

y tus entrañas me gritan que me necesitan.

Cómo salir de este gran apuro,

si me distraes en  mis pasos tan seguros

me atas a tus vientos

 atrapan tus abismos,

dulce materia y hiel

hermoso hombre de los infortunios.

En el fondo de mis pensamientos, siempre desearé para ti, donde estés, donde te encuentres que nunca te falte un amigo, una oración. Y que cures ese gran dolor incontenible que cargas.
Mi alma y mi Ser un día se derramó en ti, siempre buscando lo mejor, mas hay enfermedades que acaban hasta con la conciencia, que merman el espíritu, que desgarran hasta el hueso.
Para poder seguir dando mi ayuda, a Ti a otras almas, lo mejor fué emigrar, si no Tú desconcierto, y huracanes sedientos nos borrarían. Huy de ti, a tiempo.
Tras tanta impotencia hoy, con los ojos de la felicidad miro la desolación de Tú alma, del ave que sigue buscando volar, solo volar.
Que encuentres un buen hogar
que tu casa este firme
dejes de migrar
que de tu corazón se disipen los nublados
que logres vivir feliz.

Siempre te agradeceré que el dolor que me causaste, las desgracias que me trajeron a esta playa soleada, solo sean ya la puerta que tambien te de a ti una dicha permanente.

Pues tu mismo me llevaste a la puerta de dicha, de amor, consuelo, que ahora vivo, con la seguridad que será por siempre, pues lo peor de esta vida ya lo viví, ya no espero mas llanto, pues me lo acabé, ya no espero mas tristezas, porque te encerraste tu mismo con ellas.

Veo la luz, de un cielo azul
en un arcoíris perpetuo
con el amor del que me espera.

Deseo que el día que tu conciencia habra los ojos, y que voltees a mirar a los que dañaste, a los que utilizaste, encuentres esa paz que no te deja dormir, pues para ti solo es un sueño, pues tu vida es una pesadilla.

Salud esta noche por ti, que algún día encuentres tu sendero.

MRR

Hoy fue el último día. Que bueno que dijiste adios, era lo mejor para ti. Yo te dije adios hace muchos años, y apenas lo entendiste. Te costará mucho olvidarme todavía, porque para mi solo eres una luz que por fin apagó su pista. Ojala entiendas que no se puede decir que amas a alguien cuando todo es una mentira de la mente, palabras convenencieras, luego el insulto, luego el acoso por lo que nunc...a sería cierto, luego la amargura, luego la verdad que me da la razón. Yo si lo entendí, yo si deje de amarte hace mas de 10 años, yo si apague tu pista que tu querias mantener eterna, yo si cerré la puerta, yo si busqué otras esperanzas que me hacen hoy la gran mujer que soy. Yo si me abrí por ti el corazón y con esta acción en tu contra, me demostré a mi misma que lo cerré. Que efectivamente no te amo.

Yo no creía en el olvido y lo logré.

Mientras tu buscas borrar hoy una huella que nunca dejó pisada, otras huellas se encargaron de estar presentes. Hoy no fue un adios, hoy solo me dí cuenta que la ambición, las mentiras, y el egoismo no dejan nada de trascendencia, en la mente, en la vida y actos. Solo tiempo esteril. Fuiste viento, así llegaste asi te vas. MRR.

La batalla. 

La pasión de tus manos,
me recorre como fino pincel.
Arde mi piel se vuelve agua, luz,
los poros se enardecen:
la pasión avanza.
Saltando procede lava corporal.
Y solo llevas el pequeño roce de la pierna con tus manos
avanzaste un beso en la mejilla,
recorres despacio y seguro cada vértice de mis laberintos
borro la memoria borro ansiedades atropelladas.
Mi corazón te quiere pronto,
estar atravezado...
siguen estallando los sentidos:
luces de botones corporales en alerta próxima:
tus flores delineando los contornos de un cuerpo que se niega a esperar.
Freno estos caballos lujuriosos:
pero tu cabalgas con tus brazos y despliegas los colores del pincel río abajo.
Invitas a otra batalla.

Sabes que ganaré, sin resistencia.

Las lluvia fina como espinas que caen
mirada extraña
el desconsuelo de la voz
tristeza acumulada...

las hojas que caen de la primavera,
estaciones dolorosas.

Borrar páginas mal hechas del pasado
construir sobre las nuevas.
Llenar la casa de flores y amorosos momentos
Cantar y bailar con el hombre amado:
mirar su rostro
beber luz azul de la mirada:
tomarlo por entero como medicina de vida

los pasos solo se dan
el destino llega
luz que me limpias y sanas
precioso hombre de luz:

sea tu líquido de vida
mi sanación eterna:
tus manos pinceles de mis emociones,

que llegue la lluvia con tus besos
que las mariposas que atrapamos con el cuerpo
entren a nosostros
y nos lleven a volar juntos
el baile de los deseos.

Muera el veneno del que envidia del que odia,
vivan los segundos de tu amor.

DULAC

Las mariposas amarillas
anunciaban la retirada
y lecturas caleidoscopicas con tonos de realismo mágico
envolvían el arrullo de nuestras mentes.

Los pasos se hicieron cercanos
y a tres sillas delineabas el geométrico espejismo
el alma novel no cesaba su lectura
y volaban de tus manos  arcoiris de luz:
creabas historias aladas,
milagros taciturnos volando alrededor.

Pero luego tus manos, desamparadas
se quedaron sin su vuelo
merecian al esfuerzo de parir
los pasos al poniente de calor vecino.

La mirada encontró el destello fugaz que nos dió el camino:
manos, colores a la luz de una luna en cuarto,
puertas resguardando el andante secreto de los amantes:
la hora solo llega cuando hay caminante que encuentra el camino certero.
Cuando las manos trazan senderos
y palabras entregadas
y silencio para escuchar el sonido mas hermoso de quien llama,
las manos hacen incendios al tocarse,
una danza perpetua de los cuerpos,
y la última llamada de la vida
a ser estratégicos, certeros, perpetuarse en el otro.

Y nos llevamos de una feria a DULAC,
perdido entre el extasis de imagenes dolorosas
perpetuas, trazadas por el pincel mágico de las entrañas de existencia,
comiéndonos con hambre tanta historia
saboreando las páginas nunca vistas,
los seres de tempestad.

Compartiendo el vaporoso velo de lo efimero,
delineando nuestros pasos,
las manos cierran el amoroso pacto
y en la calle de las luces cegadoras
y tomados de la mirada y nuestros pasos,
el tiempo comido en la fantasia nocturna
besos idealizan el secreto de esta historia.

La isla de las penas

Solo para recordarte hasta el fondo de la llaga...
para que el veneno salga.
Y las espinas de esta máquina cardiaca..

El sol y el arcoíris nos encuentran a todos,
y bendigo al nuevo ser que llegó a iluminar mis días,
vida y plenamente el corazón,
un gran puente de colores tras tanto llanto,
mentiras
tanta tristeza,
engaños
traiciones,
tanta desilución.

Mi barco se aleja del puerto, deja el paraíso irreal,
de tu hermosura simulada.

Las máscaras bailan, demonios huyen.
huímos, nos volatizamos.

Van mis pasos lentos
que desean mas el naufragio, que seguir en la isla,
envenenada, herida sin remedio,
salgo, salgo, salgo.

Sigue tu danza, bailando con muñecas rotas
en el baile de las máscaras,
en la soledad del edonismo
entre promesas de viento,
y tolvaneras sin lugar.

Sigue con tu amante soledad maravillosa
engaña
coloca las cortinas que salen del humo de
cada una de las que cruzan el umbral.

Salgo y cabalgo el arcoíris:
llego,
para estar en las profundidades de este cuerpo
hermoso hombre de los colores de la luz.

Subo la escalera y salgo de este pozo,
tras un tunel incendiado
y el humo de la muerte.

El tiempo doloroso,
un acierto,
la intuición de llegar a ti:
salvan mis pasos,
una explosión
el silencio
un segundo atras y todo habia sido ceniza,
si me quedo contemplando la isla de los resentimientos.

El amor me espera en la puerta
salgo entusiasmada por las nuevas alegrías,
nerviosa
destrozo, muevo de lugar las emociones.

Como una quinceañera tras sus muñecas nuevas:
toca a mi vida
toca a mi alma, los muslos,
labios,
alas,
abre la puerta
para que naufrague
y me abrace fuerte al cuerpo de colores,
y no vuelva a la isla de las penas,
nunca mas.

Solo tengo que aceptar que nunca estuviste en mi vida
porque alguien que no reconoce el significado de otro para si
simplemente nunca existió en la vida del Otro.

Para que jugar con estas inestabilidades.
O solo saber perder.

El hospital hoy solo fue una advertencia
cinco y un mil kilómetros de tensa espera
solo un susto
solo un momento.

Para meditar en que nuestra vida pasajera debe tener un sentido.
ni tu para mi, ni yo para ti.
una llamada se quedó pendiente.

Cuelgo.

Número equivocado.

Ojala que nuestro trato a futuro
solo se de con oficios recibidos.

De las sombras.

Caminando entre sombras
desbarrancada
herida de todos los males... casi muerta.

No sabía que mi cuerpo aguantaba tanta historia
o histerias colectivas
tragos de agua amarga tomé.
La valeriana me revive
vivifica mis espacios
borra esta historia mal vivida.
Pero Ël no es el culpable.
ni yo,
nadie.
Travesuras de la mente.

Caminando entre barrancas lo encontré
luz ambarina de ojos cielo malvas sombras,
clave en todo este destino,
tras la tremenda tempestad casi lo daño,
casi pierdo el camino y las señales,
sentada en la toalla que hiba a quemar
junto a una historia fracasada,

me despertaste.

Ni el tequila había distraido a la tempestad
y nos quedamos solo mirando cada quien su camino

pero las manos traviesas buscaban otras cosas
y distrajeron nuestras mentes como si solo fuera momentaneo.

Mi mente seguia afuera, en pasiones destrozadas.
Y los pasos a la nada se hacían un libro nuevo.
Las calles se llenaron de destellos
y las manos que olvidabamos
ya habian descidido el principio.

Y abri la primera página de esta historia
y los pasos ya no eran momentaneos
surgieron etiquetas del pasado
tu siempre allí, entre líneas, imágenes
colores, sitios y figuras.

Los lugares entonces se hicieron conocidos
nombres
fechas
referencias,
tu inconsiente
yo
buscándonos.
y sabía que la inversión no era locura,

tu sonrisa, bienvenida, nueva vida
y las manos me regalaron rosas.

Fue tu cuerpo puerto conocido
y los colores de tus ojos el descanso
los brazos, besos, una fiesta
y alimento tus palabras, en mi mente.

El rompecabezas lo estoy tejiendo
hay un cuadro inhacabado,
un destino que nos une,
u otro intento.
Y tu y yo, felices dentro de la historia.
Navegando entre desconocidas rutas
guiándonos solo con el deseo
el destino
encontró dos almas rotas.

Maravilloso corazón
que no tienes derrotas.

Surgen las mil luces de un sueño inacabado:
el ave fenix
vuelve de las barrancas de la desesperanza
convertido en pájaro multicolor,
arcoiris encendidos
en la sequia el norte es primavera.

Los sentidos se iluminan
y su mirada gris
se ha vuelto azul violeta
surge el amor
que lo enciende con su melodía catastrófica
la ilusión lo guía
la esperanza lo envuelve
con mas cautela

danzando entre el canto de los lobos.

Los cuerpos se han quitado la careta
se enlazan nuevamente
y su canto callado,
su amor profundo
se ha dicho en la piel y el alma
que siempre hay un nuevo despertar
y la lluvia que mana entre las grietas insaciables
miradas tragándose las ganas
manos enlazadas
inseparables
inquietas
solo desean volver
al sitio del deseo
al vuelo fugitivo
a darse
y darse
hasta unirse en el arcoiris tempestuoso
de seres difusos,
tormentosos
que por su parecido
se dan calma.

Lanzarse de nuevo en caida libre
con la seguridad de que inicia el vuelo,
lanzarse al vacío,
y caer rápido,
sería la manera mas facil de ya no seguir meditando en el sufrimiento.

Tal vez aprender a volar
y ver como el cuerpo
y el alma por fin se liberan de un jalón
detener el dolor del alma
del músculo del corazón
de la mala vida soportada,
pues ningun ser humano
aun ha visto como se acaba su planeta.

Cada quien decide como acaba con su mudo.

Subir la montaña mas alta conocida a la vista
sin sentimientos
sin despedidas
solo lanzarse
para no volver.

El roce de la piel se ha hecho grave,

extensa luminosidad de tu cuerpo en mi,

la balanza de Calipso

los sentidos que se estrujan

por poseerse en cada centímetro:

los efluvios lloviendo entre dos seres

luz en vida

manantiales recorriendo entre el paso de las manos

hay caminos transitándos piel adentro,

que no sacian de reconocerse

expandirse

seguir recorridos de colores luminosos:

ser estar combinar,

lujuriosamente bien amados

la exaltación marca el rumbo

y la medida entre el bien y el mal solo es capricho de palabras,

nacen nuevos ríos entre las piernas,


y los cuerpos flotan,

flotan como barcas

frente al mar.

Sueño que navegas lo prohibido

almohadas que son arcas del deseo

y las manos enlazadas

recordando delisiosos movimientos.

Sed eterna de ti,
no hay caliz que me sacie,
mas allá del licor de tu cuerpo, sed de ti.
Caminar, volar, nadar,
estos refugios mas allá de tu ser, me dan sed.

Sed de ti,
amargura en el aliento meditante,
en la oración que encrudece y controla.
No hay mas que seguirte
en camino de lobos,
entre renglones de libreta pautada,
en esta libertad que corroe por los caminos inexplorados de otras mentes.

Solo quiero tener sed de ti:
para no huir al vacio,
por seguir siendo yo misma
no volver al azar
encontrando el manantial de ti
soy en mi.
Sed de ti,
reflejo de la sed mia.