Y la historia siguiò con todo y sus caretas
el baile de las máscaras tras las cortinas de humo:
con pasos amorosos
con delicadas palabras
todo lo que estaba a su paso se destruyó,
uno a uno han caido los muros de un amor mal cimentado.
y el vacio tras la verdad.

El y yo miramos sobre el muro de la experiencia:
acostumbrados a la paciencia que habeces mata
y vuelve a revivir
a un amor monótono pero seguro,
sigo en tierra firme
a quien le importa arriesgar y volar papalotes.

Calcinados por las verdades
por los ratos efímeros
y circunstancias que no dejan espacio a la meditación
sigo en esta rueda del ratón,
mientras terminan de caer los imperios desencajados
y suspiro por el pequeño orificio de mi verdad a solas,
junto a las muñecas rotas
y mis soldaditos de cárcel...

tan enamorada aun
mirando como inicias un nuevo incendio,
y que arda
que arda
que arda ¡

Excitante mirar el juego de tu luz.