lunes, 8 de octubre de 2012

Insertado en el alambre,
has llegado deletreando una canción
y cantas en tu vibrante melodía a los cuatro vientos del universo,
la candente canción de las quimeras.

Vecindades que emanan tempestades,
vuelvo a tu luz,
nunca es bueno un devenir contigo
nunca ha sido bueno tener estas atenciones con tono fúnebre,
con este destino anclado a ti o a la nada...
solo tres años, dos o ninguno.
Esta impaciencia me sabe a desdicha.

Como es que caí

Coloco la rueda de colores
en mi carretera de emociones

prefiero ignorar su lujurioso temporal,
posarme como pájaro en un nido a cantar,
pensando que nube traspasar.

Ir de un lado a otro de la nada
de la nada que eres tu
del vacío que me dejaste

pues mientras posas tus alas en mi tempestad
ya no me matas
ni hieres

solo te miro pasar
pues tu aroma ya es muy parecido
a las rosas sobrellorada lápida.









No hay comentarios.: