lunes, 30 de agosto de 2010
Disfraces
DISFRACES.
Pintar de color de rosa la verdad.
Ocultar con sonrisas y cantos el dolor del alma:
fingir con un amante comprado la amargura por lo perdido
maquillar con trabajo la desilusión.
Sonreir, al fin que
solo fue la mejor ilusión de esta vida.
Subir a la rueda de la fortuna una y otra vez y no saber
si se está de cabeza.
Dormir
para no mirar los fracasos rodados.
Mirar en la acera de enfrente a la ganadora
a la dueña afortunada de mi vida:
mas solo la verdad de los cristales rotos.
¿Muerta en vida:
porque solo veo lágrimas caer por mi rostro
porque ya no siento que mi carne se abre y se deshace
porque el acido recorrer en un cuerpo desolado
sin dolor
sin sentimiento de matar
sin sentir
y conformarse con mirar la herida propia.
Que necesidad tengo que me muestren
una y otra ves
las consecuencias de mi derrota.
Hasta cuando mirar el asesinato de mi alma:
muñeca rota
nunca te repararan.
Entiéndelo.
Deja de amarlo.
y ya vende esa alma al Diablo viejo
para que dejes de amar,
todo esta mejor.
El amor de Margarita, vale la pena.
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