martes, 6 de abril de 2010

Un nuevo mundo

Aun tiemblo:

tiemblan estas manos que te acariciaron por la tarde,
las que se resbalaron por tu espalda tan deseada
de tu ser tan solo,
como las flores blancas de geranio.

¿ En que parte se alberga tu corazón
en que trozo de pasado se esconde la historia de tu cicatriz del lado izquierdo?

Tiemblan las manos que memorizaron el recorrido por tus piernas y cada uno de tus músculos,
como trazar un mapa,
como delinear un nuevo mundo: ¿cómo se llama el territorio que ahora recorro?

¿En dónde estoy anclando esta estaca
en que nuevo corazón me he metido?:

aceptas
te invado
te exploro
no veo mapas
no veo recuerdos
solo tu sonrisa cómplice que me dice sigue…

celestinidad de estas manos que me deleitan al llegar a tu zona próxima:
desviamos por un momento los planes,
las manos transforman el territorio
de un lado a otro con nuestros abismos llegamos al encuentro en el punto del deleite:
un volcán erupciona en los sentidos.

¿Alguien dijo que no hay nuevos mundos por explorar?

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