Cantos para el que odia.
I
La soledad llega a mi, con la amenaza de un cuervo que se burla
deleitada la vivo
y la miro de frente como a una de mis iguales.
Hoy no le invito un café
pues esta amargura va mas allá de su desprecio.
Esta maldición con la que cargo
este destino invasor
esta podredumbre que me sigue
los mando al barranco mas profundo
saco la cara
me paro de puntas
Y con mi actitud desafiante los enfrento
este odio tan inmenso te lo dejo:
hombre de los mil años
usurpador de Dorian Grey, hasta que la muerte nos separe.










II
Nos se si soy yo la que escribe estas líneas,
le advierto a mis lectores
pero el día de hoy me lanzaría del edificio mas alto
de la torre mas frágil
de la escalera mas rota.
Hoy me tomaría todos los venenos en este ataque de furia
en este sitio en el que ya no tengo nada que esperar
y una vida que me disgusta.
Hoy pagaría todas mis deudas para que no te avergonzaras de mi cuando me veas rota
tirada en el suelo,
y abortaría todos los proyectos para no dejar desamparados de mi.
Mas este día me tuve que lavar la cara y el cuerpo
Y recorrer la mediocridad de mi ciudad para que me pintaran el pelo
Y comer lo que no me gusta
Y saludar
Y tolerar
Y mandar por el cable de teléfono a
Y sigo con esta vida que se consume
Y con una misión en la que no salvo a nadie

Y con la esperanza siempre presente de que saldré de viaje y me encerraré un rato en un hotel frente a la playa para seguir escribiendo una historia que nadie leerá…

Porque solo así
inventando mi suicidio
me doy cuenta en soledad junto a mi cuervo que me cuestiona
junto a Cherek que está feo y el cochinito que no raja
que si les importo.
que mañana salvaré a alguien
que el mundo me ama
y que esta misión que no se ve
solo es un puñado de arena de esa gran construcción que merecemos,
y siempre esa fuerza superpoderosa que me guía desde algún sitio sin que yo quiera
me tiende su red para que caiga sin lastimarme
pues me tienen vigilada sus muchachos.


Dios salve a la reina.


III

Amado mío:

Tenemos el entendido de que en el amor nada se cuestiona. Y espero sin esperar. Y que sabes que con la punta de tus dedos me estremeces (ese es nuestro secreto), y ya quiero todo contigo. Porque aun en esta larga espera, estar junto a ti es motivo de mi completa devoción, y que en ese instante te pongo todo a tus pies porque te amo.

Ver tu cuerpo junto al mio y saborear tu aroma me enloquece, me haces tuya y me llevas a ti siempre en este recorrido, en esa danza próxima del ser y no seder. Mas en esta lista de palabras, mas allá de decirte que te amo, y que dentro de mi eres un caracol de pasiones, y enredado a mi cintura eres todo ese universo que me detiene, y que con una mirada tuya, con esos cinco minutos que me das tras tus tormentas y ese viento huracanado me envuelve, me dejas un trozo de alma, de energía con la que me navego en la soledad, con el que soy valiente y sacaría la espada por defenderte.

Me trepo a tu caballo salvaje, a tu brisa violenta, hombre que estas en mi, y que me besas con devoción, con todo tu ser, y que te das sin despedida, con el que tengo ese hilo de luz que me repone y que quita este odio, el cual venzo cuando te ausentas, con tu luz soy y en ti me quedo.

Amado de mis estaciones sísmicas, de los pasos que sigo, continuo con mi declaración de amor, con este rezo, siempre seas bendito, y tu luz nos de guía.

I
En este enjambre de claves y de nombres
cae el granizo y se mezcla con lo frío de estos símbolos.
No encuentro la punta de la madeja y el insomnio me amenaza: -Ni una letra mas.
Me abandono a tu espejismo
y traspasas esta pantalla inhóspita con tu nombre,
con tu figura que se trasluce y se hace evidente en esta habitación.
Mientras duermes.

II
El camino ha sido largo y contabilizo los datos de las carreteras andadas:
miro como vas y bienes
como un espíritu que se diluye para volver a aparecer.
Cambiamos.
tú por la senda transitada
yo por este mediodía que te busca para siempre encontrarte.

Te agradezco simplemente
ser el Amado que sí vuelve
y no ser la peregrina sin hogar
y no ser Penélope…
me envuelvo con el orgulloso nombre de la Magdalena
para que seas siempre bienvenido.

III
Son esos besos del encuentro los que me saben al camino de los bosques
al encuentro de manzanas
al sabor de tu fruta prohibida.
Traes en ti los aromas de las lejanías que me invitan a soñar con los paraísos que transitaré,
y que en este espacio en el que te espero
y me siento contigo a platicar desde lejos
tus besos siempre están junto a mí.

IV
Experimento con las palabras
son lo único que me quedan de los olvidos.

Mas eres tu esa caja mágica por la que me asomo,
y brinco al baúl de las pérdidas
pues cada vez que mencionas la palabra olvidar
me das la llave a los recuerdos que no encuentro,
de los rostros lejanos
de los nombres
de las ciudades andadas,
y de los recuerdos que pensé estaban calcinados por esta mente y miro como a un corazón abierto.
Me reconstruyo.
platico la historia de una vida en rompecabezas, los reconozco
pues con ellos y con tu palabra que los invoca:

Vivo.